Yodo y Astato

El yodo se encuentra en la naturaleza en forma de yoduros y yodatos. Los, métodos, más y utilizados para preparar yodo son la oxidación de los yoduros por acción del cloro o del dióxido de manganeso con ácido sulfúrico y la reducción de los yodatos por acción del bisulfito de sodio. El yodo es un sólido negro que llene un ligero brillo metálico. Sublima sin fundir, formando un vapor violeta.

Es poco soluble en agua, pero se disuelve con facilidad en disolventes no polares con el almidón forma un complejo de color azul en el cual los átomos de yodo se alinean en los canales del polisacárido amilosa. El yodo disuelto en alcohol con yoduro potásico se utiliza como antiséptico.

El yoduro potásico se emplea en fotografía. El yoduro de hidrógeno se prepara por hidrólisis del triyoduro de fósforo mediante un procedimiento similar al empleado para obtener bromuro de hidrógeno. Entre los oxoácidos del yodo destaca el ácido paraperyódico, H5IO6, que por pérdida de agua forma el ácido metaperyódico, HIO4.

Astato

En 1940 se aislaron  cantidades suficientes de este elemento como para probar su existencia de manera inequívoca y estudiar algunas de sus propiedades. Se conocen alrededor de 20 isótopos del elemento. El de vida más larga es el 210At, cuya vida media es de sólo 8,3 horas. El elemento es bastante volátil y algo soluble en agua, de la que puede ser extraído por benceno o tetracloruro de carbono.