Contar con los distribuidores del servicio
El problema se complica aún más cuando la empresa no está en relación directa con su cliente. Hay que asegurarse entonces de que la comunicación a cargo de los distribuidores esté de acuerdo con el nivel de excelencia de la empresa.
Se trata de un trabajo difícil, puesto que los distribuidores, no siempre exclusivos, tienen otras prioridades y otros puntos de vista.
Uno de los métodos para asegurar una convergencia de comunicación consiste en negociar acciones conjuntas con los distribuidores.
Esta colaboración depende, claro está, de la relación de fuerzas entre las partes. Cuanto más conocida resulte la empresa al consumidor final, más fácil le resultará convencer a sus distribuidores de que actúen con ella.
Pero, sobre todo, se trata de hacer comprender, de convencer a los distribuidores de que el garantizar una perfecta homogeneidad en la promesa de servicio, redunda en su propio beneficio.
Fuente: Apunte de la materia de Comercialización de la UNIDEG.