Estrategias de implicación en la tarea
Mediante las estrategias de implicación en la tarea el estudiante genera pensamientos y conductas que utiliza como forma de aproximación o de creación de interés en la tarea. Dicha implicación puede tener dos orígenes distintos, la que procede de la gestión de la propia tarea y la que procede de la gestión de los recursos disponibles (el esfuerzo, el lugar de estudio, el tiempo, la búsqueda de ayuda).
Ejemplos de la primera forma, serían planteamientos generados por el estudiante como los siguientes:
- “Comenzaré la tarea por aquello que me resulte más agradable y después pasaré a lo que menos me agrada”
- “Como lo que estoy haciendo me resulta complicado, pasaré a otra tarea y volveré después a esta con la mente más fresca”
- “Como no me apetece seguir con esto haré un descanso y así después podré seguir con más ganas”
Ejemplos de la segunda forma, serían planteamientos generados por el estudiante como los siguientes:
- «Aunque no me apetece me sentaré y comenzaré la tarea, y ya luego el propio trabajo en la tarea creará el interés que necesito”
- “Para sentirme a gusto con esta tarea la haré en un lugar tranquilo”
- “Para sentirme a gusto con esta tarea la haré en un momento en el que tenga tiempo suficiente”
Fuente: Entrenamiento en competencias para el estudio autorregulado a distancia de la UNED, licencia Creative Commons License 2.5.