La disolución de la unidad básica de la familia ocurre con la muerte de uno de los esposos. Si el esposo sobreviviente presenta buen estado de salud, está trabajando o tiene ahorros apropiados y tiene familia y amigos que lo apoyen, el ajuste es más fácil.
El cónyuge superviviente (por lo general la esposa) con frecuencia tiende a seguir un estilo de vida más económico.
Muchos sobrevivientes buscan a otros por compañía; otros incluso se casan por segunda o tercera e incluso cuarta vez.
Fuente: Apunte de la materia Psicología del Consumidor de la Unideg