Macroeconomía y economía agrícola
punto de partida sea la definición de la función que cumple el sector agropecuario dentro de un marco macroeconómico. Esto significa definir qué produce, cómo produce y cómo distribuye la producción agrícola.
El qué produce se relaciona con la disponibilidad de alimentos, materias primas y exportaciones agrícolas, que sustituyen al sector en la generación de las divisas requeridas para importar tecnología.
De otra parte, la producción agrícola de alimentos es el componente principal de la canasta familiar o bienes-sano; razón por la cual la existencia de una oferta agrícola restringida e inelástica, frente a un alza de preci os de los alimentos, afecta la distribución del ingreso de manera desfavorable para las capas rurales y urbanas de menores ingresos.
El cómo se produce define el nivel tecnológico utilizado por los diferentes productores del agro, en la medida en que se tecnifica la producción agrícola, se genera un desplazamiento de la fuerza de trabajo rural, originando la migración campo-ciudad y, como consecuencia, un aumento del desempleo urbano.
De modo adicional, las diferencias tecnológicas en la producción de alimentos y materias primas contribuyen a elevar la transferencia de ingresos rurales hacia el sector urbano y a disminuir los ingresos monetarios de los productores pertenecientes a la denominada economía campesina.
La oferta de alimentos provenientes del sector agropecuario, bienes que conforman básicamente la canasta familiar, represen ta, por tanto, el componente fundamental en la determinación del salario urbano y, como contrapartida, la generación del ingreso rural, pues los productores agrícolas son quienes los venden y perciben por la venta de estos mismos un ingreso.
Sin embargo, en el proceso de distribución o comercialización de la producción agrícola, que se reclina mediante el mecanismo del mercado y de los precios, se presentan profundas distorsiones reflejadas en el proceso de transferencia de una parte importante del ingreso rural hacia la ciudad.
Esta transferencia se realiza mediante los procesos de intermediación en la comercialización y en el pago de menores precios por la producción campesina.
En algunos países en desarrollo, gran parte de la producción de alimentos proviene de la economía campesina. Ésta se caracteriza porque los habitantes del agro poseen pequeñas parcelas de tierra (llamados minifundios porque su extensión fluctúa entre 1 y 10 hectáreas) en lascuales desarrollan un sistema de producción diversificada y fundamentada en el trabajo familiar.
Esto significa que su producción no es de gran volumen, pues del total producido, una parte se utiliza para subsistir y alimentar los animales y la otra parte se ofrece al mercado para obtener recursos monetarios que les permitan adquirir otros bienes de origen manufacturero.
La producción obtenida, entonces, no se traduce en ingreso monetario porque no se vende en su totalidad; además, sus costos no pueden determinarse en valor monetario, dado que por el trabajo familiar no se percibe remuneración en dinero.
Por tanto, el precio de venta se fija por debajo de los precios vigentes en el mercado (aquéllos fijados por la agricultura comercial), y se genera un excedente social que pertenece a los productores del agro, del cual se apropian tanto los intermediarios como los distribuidores finales en los centros urbanos de acopio, este es el proceso mediante el cual se produce la transferencia de ingresos del sector rural al urbano.
Estas características del sector agropecuario requieren que la economía agrícola avance en la construcción de modelos macroeconómicos que permitan determinar cuál es la función que cumple este sector agropecuario dentro de la estructura productiva de la economía de un país.
Teniendo en cuenta que las condiciones económicas, políticas y sociales nacionales e internacionales de los países latinoamericanos son cambiantes, se hace necesario replantear siempre los enfoques mediante los cuales se pretende explicar el funcionamiento económico y, por ende, establecer recomendaciones de política para el desarrollo del sector agropecuario dentro de la estructura económica de un país.
Es indispensable incorporar dentro de estos modelos la importancia de conservar y proteger los recursos naturales y el medio ambiente dentro de los modelos de producción agropecuaria.
Hasta el momento, éstos no se han considerado como capital que tiene un costo y que, además, deben analizarse dentro de ciertos principios de equidad, en el sentido de garantizar su reproducción y conservación para generaciones futuras.
Esto supone incorporar variables sociales y ecológicas, dentro de la construcción de políticas macroeconómicas de desarrollo tanto para el sector agropecuario, en especial, como para la economía en general.
Fuente: Apuntes de Producción Agroindustrial de la Unideg