Prueba de ebullición
Con esta prueba se busca saber si la acidez no es demasiada alta para poder empezar la pasteurización.
El procedimiento es muy sencillo:
1. Tome un tubo de ensayo o algún otro recipiente transparente y limpio.
2. Adicione un poco de leche y ponga el tubo sobre el fuego.
3. Agítelo constantemente hasta que hierva la leche.
4. Una vez que hierva, retire el tubo del fuego y observe la leche.
Resultados:
Si se corta o forma grumos la leche, no sirve para hacer quesos.
Fuente: Apunte Taller de Industrialización de productos lácteos de la Unideg.