Relaciones públicas internacionales
También los estados son sujetos de relaciones públicas, para hacerse bien vistos en el concierto internacional.
Como las naciones, en la era moderna, están cada vez más próximas unas de otras y unidas por influencias mutuas más estrechas, nada puede ser menospreciado en sus contactos.
La buena opinión que sobre un determinado estado se tenga en el exterior influye cada vez más en su vida política e incluso económica.
Hoy ningún país se puede dar el lujo de encerrarse en sus fronteras, prescindiendo olímpicamente de lo que se digna fuera de ellas.
Son, en el fondo, relaciones públicas políticas los viajes de jefes de Estado.
Pero también las embajadas culturales, la difusión de bellezas o glorias del país.
Por supuesto, las relaciones públicas internacionales no se agotan con estas realizaciones más espectaculares.
También son muy útiles los servicios permanentes, tales como las oficinas de información en el extranjero, los institutos de cultura, que programan regularmente cursos de idiomas o de ampliación de estudios.
—¿qué mejor modo de fomentar la amistad que a través del conocimiento de la lengua y cultura?–, los servicios de intercambios estudiantiles, ferias, concursos, etcétera.
Fuente: Apuntes de la materia Psicología del trabajo de la facultad de contaduría y administración, UNAM