Solidaridad económica
El asegurarse o tratar de asegurarse fuentes de materias primas fue la causa de muchas guerras entre países vecinos y de conquistas coloniales. Es de esperar que en el futuro los seres humanos serán más razonables, y que la creciente justicia económica entre los hombres de un mismo país, que acompaña al progreso industrial, será también la regla entre las naciones.
Ya se conocen muchos ejemplos de países ricos que ayudan a los que se hallan menos desarrollados, para que aumenten su equipo industrial y eleven su nivel de vida, porque se reconoce cada día más la interdependencia económica de todos los países.
Estadistas y economistas están aprendiendo a mirar más allá de las fronteras de sus propios países y a considerar unidades económicas formadas por países vecinos. El Mercado Común Europeo reúne a Alemania Occidental, Bélgica, Francia, Grecia, Holanda, Italia y Luxemburgo.
Su propósito, según el tratado de Roma firmado en 1957, es eliminar las barreras aduaneras y todas las demás medidas que impiden o traban la libre circulación de los bienes en su territorio; armonizar las leyes sociales y permitir al vecino de cualquiera de los 7 países miembros buscar empleo en otro; nivelar los impuestos y fomentar la competencia para rebajar los precios y, en general, tomar todas las medidas necesarias para desarrollar la producción y el consumo, lo que equivaldría a mejorar el nivel de vida en todos estos países.
Con el Mercado Común Europeo están asociadas muchas de las antiguas colonias francesas e italianas de África y territorios de ultramar de Francia y Holanda. Otra organización económica en Europa es la Asociación Europea de Libre Comercio, integrada desde 1959 por Austria. Dinamarca, Gran Bretaña, Noruega, Portugal, Suecia y Suiza; su programa es menos extenso y tiende solamente a eliminar las barreras aduaneras existentes entre los países miembros.
En América Latina se han concertado dos organizaciones, la del Tratado Multilateral de Libre Comercio e Integración Económica Centroamericana, formada en 1960 entre el Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua, y a la que más tarde se adhirió Costa Rica, y la Asociación Latinoamericana de Libre Comercio, formada en 1960 entre Argentina, Brasil, Chile, México, Perú y Uruguay. En 1961 se adhirieron Colombia y Ecuador.
Según el Tratado de Montevideo, el propósito de ésta es eliminar los aranceles aduaneros y otras trabas al comercio por etapas sucesivas en un plazo de doce años, y fomentar un planeamiento del desarrollo industrial de los países miembros.
Fuente: Apunte de la materia de Comercialización de la UNIDEG.