Tipos de mercado
Las imperfecciones de la competencia determinan los siguientes mercados:
– Monopolio. Ocurre cuando es un solo productor quien controla de manera absoluta el mercado. Como ejemplos, pueden citarse los casos en los cuales sólo existe una empresa cultivadora de papa, caña de azúcar o cuando toda la producción de café es comprada por el gobierno, o cuando sólo existe una empresa que compra toda la producción de leche de todas las granjas cercanas a esa empresa.
Algunos rasgos básicos del monopolio son la existencia de productos sustitutos, lo cual hace que el consumidor tenga que comprar solamente lo que produce el monopolista. De otra parte, la empresa monopolista puede modificar la cantidad de productos que ofrece, con el fin de lograr control sobre los precios. Por lo general, disminuye la producción para incrementar las ganancias con mayores precios.
Monopolio bilateral es el mercado en el cual se presentan un solo demandante y un oferente; es muy común que tanto el uno como el otr o constituyan asociaciones de empresas.
Un ejemplo lo constituyen los pequeños empresarios agrícolas que venden su producción de frutas a una misma fábrica de conservas; estos empresarios se encuentran en régimen de monopolio (cuando una única empresa compra el producto a un grupo de otras), si actúan de modo independiente, debido a q ue los elevados costos del transporte dificultan llevar la fruta a otra fábrica ubicada lejos de la zona.
Con el fin de evitar el monopolio constituyen una organización encargada de negociar un contrato colectivo con la fábrica de conservas. De otra forma surge un monopolio bilateral entre ese frente común de agricultores (oferente único) y la fábrica de conservas (demandante único).
– Competencia monopolista. Se presenta cuando unas pocas empresas con productos diferenciados manejan el mercado, de tal manera que una o varias de ellas logran hacer que los consumidores se decidan por los que ellos producen. La mencionada diferenciación en la mayoría de los casos es aparente y toma variadas formas.
Por ejemplo, un bulto de arroz marca Supremo, disponible en una tienda; es diferente a un bulto del mismo producto que se vende en una tienda ubicada en un lugar remoto.
Las diferencias de empaque, calidad o condiciones del crédito pueden conducir a una diferenciación del producto. Otra forma importante de diferenciación la constituyen las diferentes marcas registradas que utiliza una sola empresa cuando produce productos similares con empaques y nombres distintos.
La curva de la demanda del competidor monopolista es menos que perfectamente elástica (con pendiente descendente), lo cual muestra que existe una competencia menos que perfecta, debido a que los productos de las distintas empresas no solamente son similares, sino que constituyen buenos sustitutos de los demás. Por eso las diferencias de precios pueden lograr que los consumidores acepten productos semejantes pero a un menor precio.
– Oligopolio. Se trata de un mercado con pocos oferentes y numerosos demandantes. Ejemplos de oligopolio se observan en los mercados de muchos productos industriales, detergentes, licores, etc.
En el oligopolio las empresas oferentes se enfrentan entre ellas mismas para asegurar bien sea la optimización del beneficio, el crecimiento de la propia empresa, la expansión de su mercado, la eliminación de sus rivales, etc.
La lucha entre los oligopolios concluye con un acuerdo de unión según el cual las empresas se comprometen a seguir unas reglas comunes de juego para enfrentar el mercado; de esta manera aparecen los trust, trustes o monopolios y los carteles.
Fuente: Apuntes de Producción Agroindustrial de la Unideg